La Font

Este monumento tiene un significado muy relevante para el pueblo de Llutxent. Cuando todavía no había agua potable en las casa (llegó muy tarde con respecto a los pueblos de alrededor) todo el mundo recurría a la fuente para llenar sus cántaros.

La gente se sucedía en la cola prácticamente a lo largo de todo el día, según me explica mi abuela. Por eso los vecinos solían dejar los cántaros al cuidado de algún conocido para no echar el día allí. Aunque claro, se encontraban con alguna sorpresa si no tenían cuidado y volvían pronto (cántaros rotos o vacíos y al final de la cola).

Aquí se ha celebrado durante años el mercadillo del pueblo y es un referente importante para los habitantes de Llutxent.

Ahora mismo es una fuente de agua potable accesible, bonita, antigua (restaurada) y con unos muretes que sirven para descansar.

El aparcamiento no es muy bueno en esta zona. Es recomendable aparcar en otro sitio y llegar andando.