El Sauce

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Un lugar de los de toda la vida. Y qué te vas a encontrar en un sitio así, pues comida de la de toda la vida, casera y muy sabrosa. Nosotros nos decidimos por unas croquetas (con una bechamel ligera y deliciosa), unos calamares fritos (con un rebozado espectacular) y un queso del país como entrantes. De platos principales tortilla con chorizo (al estilo de Betanzos), huevos fritos con chorizo, huevos fritos con jamón, ensalada de la casa, lomo con salsa de manzana (sencillamente riquísimo) y una milanesa de cerdo (también muy rica), de postres un corte de helado (del de toda la vida), unas fresas con zumo de naranja, dos mousse de queso (suave y muy rica) y dos cremas de limón (sabrosas y buenísimas), para terminar cuatro cafés con gotas que acabaron siendo ocho, para beber agua. Todo ello por 92,50 €. Nos sorprendió que en la carta no hubiera pescado, desconozco si en el menú del día que tienen de lunes a viernes lo incluirá en algún plato, pero puedo asegurar que pidas lo que pidas no te equivocarás, está todo buenísimo y muy bien cocinado. El sitio está decorado de manera tradicional, muy acorde con el entorno en el que se encuentra. La atención fue muy buena, con un personal muy amable y sin tener que esperar mucho entre platos, sirviendo a todos los comensales a la vez sin tener que estar esperando unos por los platos de los otros.

Precioso lugar con encanto, "enxebre", familiar y con buen trato. Comida tradicional al estilo gallego, muy bien servido y a buen precio. Recomendable reservar.

Nunca falla. Siempre vas a acertar. Necesario solicitar mesa con antelación, si no, "lo bueno se hace esperar"
Trato excepcional.
La s_angría no tiene comparación (en nuestro caso sin Martini), buenísima.
Y más que recomendado el codillo (se deshace con mirarlo) para 2 con puré y chucrut y el pastel de cabraccio para ir entrando. Todo lo demás está increíble también (esos son nuestros platos preferidos)
Café de pota...top10

Un lugar fantástico para comer; con una calidad fuera de duda, una abundancia increíble y una atención más que personalizada. Recomendable a todos los efectos. Comimos 7 personas. Codillo, tortilla de papatas, ensalada, parrochitas fritas con pimientos de Padrón, 5 cervezas, 4 aguas minerales y dos botellas de vino Mencia. Repetiremos.

Fantástico lugar que representa lo maravillosa que es la cocina gallega.

Enxebre como pocos, escondido en medio de la ciudad vieja, tiene una selección de platos tradicional donde está todo bueno, pero el codillo es excepcional.

Pero, por encima de todo te atienden de la mejor manera posible. Una joya de la hostelería coruñesa.

Para mí, éste es mi restaurante favorito de toda la vida.

No me canso de comer ahí y he llevado siempre a amigos que han venido de fuera de La Coruña y es un éxito total.

Todo está muy rico..., no sabría qué recomendar. El codillo con chucrut está espectacular, la tortilla también, la carne en rollo, el raxo, la ensalada de arroz... Me encanta todo. Ah, y el sorbete de limón y el de fresa, uhmmmm, riquísimos y fresquitos. Un diez. Ah, y no hace falta pedir un vino carísimo..., la jarrita con el vino tinto de la casa ya está super bueno.

El restaurante es enxebre, tremendamente acogedor. Todo el ambiente es como muy entrañable, algo difícil de encontrar hoy día en un restaurante, que prima más lo moderno, para mí más frío. Los dueños son encantadores; la verdad es que entras y ya te sientes como en tu casa.

Hay muchos clientes que llevan años yendo a comer o a cenar allí, así que a veces entras y te encuentras a un montón de gente conocida y es una sensación muy chula :)

Los días que hace solete puedes comer fuera, en la placita con el sauce; al estar en la ciudad vieja, el entorno es muy tranquilito..., el suelo empedrado, la falta de coches desde que se ha peatonalizado hacen que parezca que estuvieras en un pueblo. Eso sí, hay que conocer el sitio porque está como un poco escondido y para mí, ése es uno de los encantos que tiene. Hay que reservar porque no es muy grande y tiene muchos fieles, entre los que me encuentro :) pero merece la pena.

A mí, la verdad, es que me encanta. Lo recomiendo a todo el mundo con la certeza de que van a salir encantados.

Muy bueno todo lo que probamos, comida casera de verdad en un restaurante con decoración acogedora. Muy amables en el servicio. Por cierto, fue el único local en cuatro días de estancia en A Coruña en el que me pidieron el pasaporte Covid, señal de su profesionalidad y del cuidado de la salud de los clientes. Mis felicitaciones por cumplir con la normativa

Excelente comida , iugar tranquilo y auténtico, y muy amable el personal. lo recomiendo 100%

Sencillamente delicioso. Una ingeniosa combinación entre el sabor de la comida tradicional hecha con mucho esmero y una atención excelente. El codillo y las croquetas recomendadas al 100%. Ideal para comerse algo rico mientras se pasea por el centro de Coruña.

Estuvimos comiendo allí y nos encantó.
Fue menú del día y estaba todo riquísimo, las croquetas de cecina estaban buenísimas.
El sitio es muy acogedor, familiar y tiene mucho encanto en el sitio donde se encuentra. La ciudad vieja de A Coruña nos encantó.
Eso sí, reservar primero y disfrutar del sauce de la puerta.
Sitio que debes probar si vas a A Coruña, te va a encantar

Maravilloso cocido, experiencia magnífica y un lugar inigualable

Toda la comida de este local está riquísima. A destacar su tortilla, un manjar absoluto. Rinconcito en la ciudad vieja con encanto. La carta no es muy extensa pero todo lo que tienen tiene una calidad exquisita. Fui en una cena de empresa y quedamos encantados todos, luego llevé a mis amigos y también fue un éxito.

Espectacular, menú del día a 10 euros y todo riquísimo. Buen servicio. Local muy bonito.Carta escasa pero todo casero, de calidad y muy bien preparado. Cuando vuelva a la Coruña repetiré sin duda

Espectacular, además de un trato perfecto la comida era totalmente casera y hecha al momento. Precios muy buenos: unos pimientos de padrón, una tortilla para dos, ración de queso estilo tetilla con anchoas, 2 cervezas, 2 vinos y postre a compartir 30€.

Un sitio enxebre con una comida espectacular totalmente casera, nada de innovaciones (plato grande-ración pequeña) y la tortilla espectacular!.

Pequeño restaurante de ciudad, apartado en un rincón muy bonito junto a un sauce. Lleva muchos años, es un lugar auténtico, de pocos platos pero muy buenos todos, es indicado para tomar vinos también. Recomiendo la tortilla de patata, deliciosa.

Comimos muy bien. Elegimos croquetas, calamares a la Romana y tortilla de patata para dos y genial. Buena cantidad y muy muy bueno. La tortilla en su punto, 12 croquetas súper cremosas y unos calamares con un rebozado muy crujiente. Lo recomiendo!!!

Excelente mesón. La mejor tortilla que he probado nunca (es jugosa, tipo Betanzos pero con más equilibrio entre patata y huevo). Muy buenas las croquetas de marisco y excelente el codillo. Muy bien de precio.

Comida rica y local enxebre. Muy bueno