Colchones Dulces Sueños Morales

Encantada con la atención. Buena calidad precio. Toda la familia llevamos años comprado los colchones en esta empresa y estamos encantados. Recomiendo 100%

Siempre compro los colchones en esta tienda porque estoy bien asesorada y porque ofrece calidad

Todo súper bien

Muy poca seriedad en el envío del producto.
Me dieron plantón sin avisar y cuando volvieron la segunda vez , no pudieron montar la cama porque faltaba alguna pieza.Señores de Dulces sueños, el tiempo de los clientes es tan valioso como el suyo y deberían respetarlo

Hemos comprado 3 camas, y contratamos la retirada de las camas que teníamos y cuando llegó el chico con nuestras camas nuevas, decía que solo se llevaba las camas si estaban desmontadas. A mí nadie me advirtió de que tenía que desmontarlas.Ademas, bastante agresivo a la hora de hablar.Todo el buen trabajo en tienda, estropeado por el transportista.

Compré un colchón y un canapé, en diciembre de 2020, hace 3 años y 2 meses.
El colchón se ha deformado y tengo la zona lumbar y la pierna por dónde me levanto hundido, el colchón me costó más de 1000€, he llamado y me dicen que ha pasado la garantía, no pueden hacer nada, creo que un colchón de ese precio y a los 3 años le ocurra esto, no volveré a comprar nada en DULCES SUEÑOS, y no lo recomiendo para nada.

Horrible!!!!. Compraron mis padres unos sillones con mando, al cabo de unos días el sillón dejó de funcionar!!!!. Fueron mis padres a comunicarlo a la tienda y dieron parte a su servio técnico. Al cabo de unos días nos comunican que mis padres manipularon el motor y que tendrían que pagar 50€ más por la reparación. SIENTO IMPOTENCIA NO HABERME ENTERADO ANTES, como puede acusar a un matrimonio de más de 70 años a sentirse culpables de algo que es imposible de haberlo hecho ellos. Se pagaron los 50€ pero NUNCA MÁS VOLVEREMOS A ENTRAR NI HA RECOMENDAR DICHA TIENDA.

Son fabricantes cerca de Molina de Segura, pero tienen precios por encima de Flex o Pikolín.
Compré un sillón para mi madre de 83 años con Alzheimer y, cuando llegó, era demasiado alto para ella (no puede salir a la calle a probarlo). Pues sin tocarlo fuimos al día siguiente y se negaron en redondo a hacernos un "vale" si les devolvíamos el sillón nosotros. Tenían que volver a recogerlo ellos, cargándonos 50 € (el sillón valía menos de 250 €) por un servicio que no necesitábamos (vivimos a 150 metros). Me pilló muy liada y no puse la denuncia que tendría que haber puesto en Consumo. Perdieron mucho dinero conmigo a futuro.
En definitiva, aseguraos bien de lo que vais a comprar porque luego no dan la cara.

Faltal, la experiencia post venta pésima. Mil escuchas para no tramitar la garantía.