Pilar Prieto

Gran variedad de estilos y de tallaje. Ubicado en pleno centro de Aranda, siempre pilla de paso para poder echar un vistazo rápido.
La atención siempre muy buena, asesorando en todo momento.

Me encanta la ropa, sienta muy bien y precios asequibles, la atención siempre de 10,

Mucha variedad de ropa en todas las tallas, trato muy atento por las dependientas y en el centro de Aranda.

Mi tienda preferida, el patronaje es ideal para mí. Las dueñas, muy agradables, muy buena atención hacia la clientela

Variedad de colores y tallas. Ropa a un precio razonable.

Me gusta mucho la ropa

Esta mañana acudí a la tienda que Pilar Prieto tiene en Aranda de Duero con mi madre para probarle unos pantalones que le habían regalado por su cumpleaños.
Mi madre es una persona minusválida, con una lesión medular, camina muy poco, con mucha dificultad y no tiene equilibrio. Además es invidente y va con su muleta. Ella iba de mi brazo. Nuestro error entrar en la tienda a las 13:40. Ya de entrada la dificultad para entrar con ella pues ni siquiera hicieron ademán de ayudar para subir el súper banzo de la entrada (barreras arquitectónicas que ya te están haciendo pensar si entrar o no). Entramos y no escuchamos respuesta al buenos días. Cuando apareció la dependienta del pelo corto lo primero que nos espetó fue que iban a cerrar después de decirle lo que yo iba buscando, probar una talla más del pantalón. Le tuve que pedir por favor una silla para mi madre porque no puede estar de pie. La sacó del probador y de mala gana me sacó un pantalón y la dije que lo probaríamos. Mi madre es minusválida pero no tardamos 3 minutos en hacerlo. Nos volvió a decir que iban a cerrar. La pregunté por unos short ya que la tenía en el cambiador y la otra chica no fue tan desagradable pero la señora del pelo corto, por cuarta vez, nos dijo que iban a cerrar. Ya no miramos más. Salimos de la tienda y eran las 13:50. Pone que cierra a las 13:45, pero de igual forma creo que hay que ponerse un poco en la piel de un enfermo con tantas dificultades, que nos costó llegar a la tienda un montón de tiempo y que tampoco suponía mucho cerrar 5 minutos más tarde haciendo una excepción, pues mi madre vive a dos horas de Aranda y tampoco pudimos ir antes. Está en todo su derecho, pero creo que no le va de más haber esperado un poquito, haber tenido un poquito de empatía y de educación. Yo me dedico al mundo de la educación y personas como ésta me hacen cada día creer menos en la educación, en el compromiso y en la empatía y ponerse en el lado del débil. Espero que nunca le pase a ella todo lo que hoy arrastra mi madre, que a pesar de ser no muy mayor la vida la trató de forma muy cruel. Nunca mas volveré a entrar por esa puerta después de haber comprado mucha ropa allí a mi madre. Lo único que ha hecho es quitarle las pocas ganas que tenía la pobre de comprar algo a pesar de su estado de salud. Gracias.

El jueves 9 entré a comprarme algo y al dar los buenos días, la señora que estaba atendiendo ni siquiera me miró. Es una pena porque en una ocasión me compré un pantalón y me sentó muy bien, por lo que he regresado en dos ocasiones, pero siempre me ha pasado lo mismo.

Estoy llamando al teléfono que se indica y no puedo contactar con la tienda.

Ayer me compré un vestido (24 euros en rebajas) y al lavarlo para estrenarlo siguiendo las indicaciones de la etiqueta, se han deshilachado varías zonas, entre ellas, el escote porque la remalladora no ha cogido correctamente el dobladillo.

La calidad en el acabado es nefasta.

Si compráis en Pilar Prieto, revisad minuciosamente los acabados.

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