Lycée Français de Bilbao

Estamos encantados con el nivel educativo del colegio. El programa académico es muy completo y riguroso, lo que está permitiendo que nuestros hijos no solo adquieran conocimientos, sino que también desarrollen su pensamiento crítico y su creatividad. Los profesores están altamente cualificados y se nota su vocación por la enseñanza, con un compromiso diario con el progreso y el bienestar de los niños.

Además, el ambiente multicultural es un gran valor añadido, ya que permite a nuestros hijos crecer en un entorno abierto y global.

100% recomendable.

Recomiendo encarecidamente el liceo de Bilbao. Nuestros hijos acuden a este centro y nos sentimos parte de una gran familia, donde se preocupan por el desarrollo integral de los alumnos. El ambiente es acogedor, alegre y al mismo tiempo exigente, lo que hace que nuestros hijos disfruten venir cada día. Además el colegio y el sistema francés fomentan la creación de un espíritu crítico, tan necesario hoy en día, ayudando a los estudiantes a pensar de manera independiente y analítica. ¡Recomendamos este colegio sin duda!"

Mis tres hijos son alumnos y solo puedo destacar lo felices que van al colegio. Ambiente familiar, implicación personal de profesores y trabajadores, además de un tipo de enseñanza que únicamente se consigue en el sistema francés. Para nosotros como padres es una satisfacción ver cómo aprenden idiomas sin darse cuenta. Sin duda, lo recomiendo.

Una educación basada en enseñar a pensar a nuestros hijos e hijas, en desarrollar su espíritu crítico para tener ideas propias. Y un buen ambiente educativo. Muy contenta yo, muy contentos mis hijos!

Excelente colegio. Muy buen profesorado, muy buena calidad en la enseñanza y en la transmisión de valores. Excelente servicio de transporte, llegando a cualquier punto, y de comedor. Los alumnos aprenden el idioma de forma natural y muy fácilmente. 10 estrellas en todo.

La prueba más valiosa de lo que representa el Liceo Francés para mi, es que después de haber pasado allí todos mis años de escolaridad, ahora son mis tres hijos los que siguen mis pasos. No es un colegio barato pero vale la pena cada euro invertido en él. Lo más evidente es el idioma, eso está claro. Saber francés te diferencia de todo el resto de estudiantes que sólo saben inglés y te abre las puertas a muchísimos más trabajos, experiencias y vivencias, que de otra manera no accederías. Pero es que el idioma lo aprendes a través de un sistema educativo totalmente diferente que te aporta otras cualidades que de nuevo te diferencian del resto de alumnos. Desde muy pequeños aprendes a pensar, a razonar, a estructurar, a crear, a experimentar...Aprendes otra cultura, otra historia y eso te da una perspectiva diferente que te enriquece por todos lados. Adquieres valores como la igualdad, la convivencia, el trabajo en equipo, el respeto, la libertad,...que serán fundamentales para convertirte en el adulto que quieres ser. Una vez fuera del liceo, sus alumnos no tienen fronteras. Todas las universidades y empresas conocen y valoran muy positivamente ese factor diferencial. Si estás buscando colegio para tus hijos, yo no lo dudaba. Es una inversión de futuro que tus hijos te agradecerán toda la vida.

El colegio francés se distingue por su cercanía con los alumnos y su compromiso con el aprendizaje. Los profesores y el resto de colaboradores se preocupan por cada estudiante y fomentan un ambiente de apoyo. Además, ofrecen diversas actividades extraescolares que enriquecen la formación académica. En resumen, es un lugar donde se aprende y se valora a los alumnos!

Los niños aprenden a pensar, a ser personas, a tener criterio y opinión, todo ello en un ambiente fantástico y un entorno maravilloso. Los profesores tienen vocación de enseñar y, éso se nota y mucho en la felicidad y evolución de los niños.

Los niños asisten encantados a las clases; buen ambiente entre compañeros y la relación con los profesores es muy cercana. Se fomenta la autonomía, educación y creatividad desde una edad muy temprana.

Sin duda un acierto haber elegido el LFB para la educación de mis dos hijos.
Un colegio con una metodología diferente, no estudian de memoria sino que los conocimientos los adquieren de una manera distinta.
Un centro con un buen ambiente de profesores , y eso hace que los niños vayan felices
Lo recomendaría una y mil veces
Me gustaría terminar agradeciendo a todo el equipo que hay detrás de esa gran familia que es el LFB, gracias y más gracias

Desde pequeños les enseñan a reflexionar, analizar y disfrutar de la diversidad que hay en el Mundo. Los niños van y vienen felices del cole, con un gran nivel de aprendizajes.

Tengo mis dos hijas allí y lo recomiendo totalmente.
Muy contentos con el sistema, aprendizaje y profesorado , así como con el entorno.
Nos alegramos mucho de la elección que hicimos en su día.

La decisión de escoger centro escolar para tus hijos es complicada, muchas cosas a valorar. Después de más de 10 años con mis hijos en el colegio, estamos encantados, por su enseñanza y valores!

Además de la tranquilidad que me da estar en un sistema educativo sólido, perfectamente implementado por este liceo enfocado a los idiomas y al futuro, tengo que añadir que es una maravilla la calidad humana de todo el equipo docente y el que no lo es también, la preocupación por los niños que son el centro constante y la educación en valores presente en todo lo que se lleva a cabo.

La mejor decisión ha sido mandar a mis hijas a este colegio en el que fomentan el esfuerzo, el compañerismo, la reflexión y el dominio de un idioma que les abrirá muchas puertas el día de mañana.

Mis hijos son alumnos y estoy encantado, la forma de enseñanza, profesorado y actividades extracurriculares son de 10

Muy contenta con el colegio, mi hija va feliz y eso es lo más importante!!

Recomiendo totalmente el colegio: por su profesionalidad, trato, seguimiento, metodología...sin duda la mejor elección.

Como madre de dos niñas pequeñas que van al Lycee, cada año reafirmamos que fue la elección correcta.

Con dos hijos ya fuera, sólo tengo palabras de agradecimiento y de reconocimiento hacia el Liceo. En todas las universidades les reciben con los brazos abiertos, llevan una magnífica preparación y se adaptan perfectamente a los diferentes sistemas. Todavía me quedan otros dos en el colegio y aun siendo cuatro hermanos con personalidades totalmente diferentes entre ellos, estoy segura de que cada uno encontrará su camino. Como antigua alumna, me llena de orgullo y de satisfacción saber que la institución que elegimos hace años para formar a nuestros hijos ha sido sin duda, un acierto y que el esfuerzo merece la pena. Muchas gracias.