Bar Saganta

Vaya agradable sorpresa descubir este bar.
Veniamos de excursion a Montanejos y no paramos alli a comer por no poder aparcar. Seguimos camino y descubrimos este sitio estupendo donde nos dieron ce comer por poquísimo dinero, 12 euros cada uno; primero una ensalada bien condimentada con jamón, frutos secos y aderezada con una reducción de vinagre de Módena (espectacular), de segundo unas alubias negras estofadas con trozos de tocino, chorizo, morro y alguna cosa mas (riquísimas) de tercero un filete de cerdo a la plancha con paratas fritas, pimientos y habas (buenísimo) luego de postre una tarta de calabaza y otra de queso y frambuesa, mas dos cafés con leche. y bebimos un botellón de Agua de Solan de Cabras
La comida excelente, pero el trato de Maribel, Vicente y otra señora de la que desconozco el nombre, mucho mejor que la comida.
Si duda que repetiremos aunque este a casi hora y media de Torrenostra

Como hija de los dueños del bar saganta, os informo por aquí que mis padres cerraron por jubilación ya hace unos meses, agradecemos enormemente el cariño y el paso de todas aquellas personas que han venido a visitarnos !

Después de 49 años al frente ya tienen su merecido descanso.

Quizá con el tiempo vuelva abrir sus puertas con nuevas caras y mucha ilusión!

Muchísimas gracias a todos!!

Vam dinar ací després de fer les dos ferrates de la zona i molt contents amb el menú, el servei i la pau el poble. Ensalada completíssima i carn a la brasa, tot inclòs, per només 15€. Recomane.

Fuimos entre semana y estábamos solos. Menú 13€ y muy completo. Bebida, pan con ajoaceite y tomate para untar, una ensalada super completa (brotes verdes, nueces, jamón delicioso, dos tipos de queso, pipas...) y de plato principal tenían arroz meloso con conejo y alcachofas. Buenísimo todo. Mención especial al postre, yo pedí tarta de queso casera con mermelada de frutos rojos casera, espectacular. El trato muy bueno, volveremos sin dudar. Eso sí, ya nos dijeron que en fines de semana y verano aquello se llena.

Si no tienen bebida Sin Azúcar de tu gusto, te la hacen en el momento, muchas gracias, cosas que en otro sitios no se molestan. (Limonada con sacarina 🥰)

Maribel y Vicente nos han atendido y mimado con unos bizcochos dulces y salados exquisitos. Muchas gracias!!!.Excelente sitio para descansar y comer rico después de un senderismo

Llegamos por casualidad y requiere de dicha reseña, la dueña tuvo un trato espectacular con nosotros, el niño quería bravas y de primeras, por las horas que eran ya no servía y aun así, dijo de hacerle unas patatas fritas, los bocatas que pedimos estaban increíbles, el embutido buenísimo.
Me quedo sin duda con su nombre para volver porque da gusto cuando te atienden con tanta simpatía y amabilidad, añadiendo que el lugar es precioso.

Menú y atención estupendas. Ensalada, tapas, paella y postres buenísimos y abundantes. Fuimos 18 personas y nos encantó. Volveremos!!

En lunes festivo en Valencia, pero no en Espadilla, posiblemente tenían previsto no abrir, pero a pesar de ello, nos permitieron reservar para degustar una sensacional paella, unas ensaladas de muerte y un carajillo top. Gran atención por parte de la dueña y unas vistas de lujo a la Penya Saganta

Todo un descubrimiento. Volvíamos de Montanejos y hemos parado a comer en Espadilla. Hemos comido muy bien. Comida casera. Alubias con manos de cerdo, una ensalada con queso de cabra, frutos secos y jamón y carne con patatas. Que decir de los postres!!!. Tarta de chocolate blanco y tarta de calabaza con bizcocho caseras. Más los cafes. Maribel es una cocinera excelente. Todo muy rico y muy bien servido.Son amabilisimos.
Seguro que repetiremos

Las vistas de la terraza muy bonitas. La chica de la barra muy amable.

Nos bañamos en el río y comimos aquí. Comida espectacular y trato inmejorable. Sin duda repetiremos al año que viene.

Férem la vida ferrata i per a dinar estiguérem al bar i quedarem tots,15 persones, en la terrassa i estigué tot molt bé. Encantats. Tornarem segur.
Moltes gràcies

Bar a pie de Penya Saganta, vistas geniales.
Han cambiado de dueños este año, pero sigue con la esencia del bar Saganta de siempre.
Como recomendación la sepia y las tapitas del domingo.

La propietaria muy atenta y simpática, comida casera excelente y precio muy contenido

Buena comida,muy amables y muy buenas vistas

Llegamos muy tarde para comer (sobre las 16h) y aunque ya estaba cerrado el propietario volvió a encender la plancha para prepararnos unos bocadillos riquísimos de embutido de la zona. Las tapas que pedimos también súper ricas y, además, con un precio muy económico. Quedamos muy contentos y lo recomendaríamos sin duda alguna.

Una belleza ese sitio 🤍

Buen servicio la comida entre ellas los arroces de Alex con galeras increibles y los carajillos de cine

Hemos ido a comer unos amigos y calidad, precio y cantidad increíble