El Comedor De La Esquina

Bueno, recién llegados a Suances, damos una vuelta por el muelle para decidir dónde comer y nos decantamos por este bar, en el que amablemente parece que estába el camarero esperando fuera al acecho de algún forastero humilde.... Entramos dentro yo, mi marido y nuestras dos niñas y nos lleva a un comedor que olía fatal nada más entrar, y los dos primeros vasos que nos trae para las niñas, solo decir que no se podían ni ver ni de lejos, sucisimos. Nos pedimos el menú especial, 15.75 cada uno más el menú y plato combinado de las niñas. La comida Era nefasta, tabla de ibéricos, secos no, se quisimos, tiesos.... Las pechugas de la niña igual, y los macarrones de nuestra otra niña.... Igual o peor. El entrecot, un filete pequeño, gordo y duro con un montón de grasa que se hacía chicle a pesar de pedirlo al punto y señores... Frito con ajo. ¡¡ Y la merluza de mi marido que se supone que era fresca, fresca del siglo pasad. En fin, después de dejar toda la comida en los platos y decírselo al camarero, nos han cobrado 45 grandisimos euros y lo mejor de todo, esque a sido el camarero el que a venido a pedir disculpas, que por supuesto, no equivalía a los 45 euros, mientras creo que era el jefe, se a quedado sentado afuera en la barra riéndose con otros clientes y encima mirándonos con mala cara al salir. En fin, no volveremos en la vida. Comida nefasta. No se lo recomiendo a nadie.

No recomendable. Carta muy escueta aunque puesta en un atril para poder verla antes de decidir si sentarte. El problema empieza cuando los productos que más llaman la atención de la carta no están disponibles. La calidad en general deja mucho que desear y eso que las esperas son largas. La apariencia tampoco es buena pues a simple vista se ve mucha suciedad.

Todo comenzó con el pan duro que tuvimos que pedir que nos lo cambiaran por otro, que vino parecido... El arroz con marisco estaba sequísimo como si lo hubiesen cocinado días antes, tuvimos que pedir mayonesa para poder comerlo... En los segundos platos las patatas estaban aceitosas, imposibles de comer y los filetes de lomo y pechuga crudos como si hubiesen sido congelados y cocinados... Pedimos un par de servilletas de papel y vinieron sucias... Los vasos también estaban sucios... No entiendo como las inspecciones permiten la apertura de este tipo de negocios...