Casa Rural El Atroje

A great rural house, only four rooms all with wood burning chimney situated in a cosy village. There trekking routes from the village and only 45 minutes drive to Cuenca.

La casa es una preciosidad. La habitación muy chula, amplia, limpieza adecuada.
Con mini bar, chimenea, balcón...
Y para rematar, un desayuno en el bar La Rebotica estupendo.
Muy muy recomendable

Hemos pasado un fin de semana en este casa rural y todo estupendo,el dueño es muy amable y la casa tiene todas las comodidades... además a unos 15 min en coche tienes en los alrededores lugares muy bonitos para conocer. Nosotros fuimos por un smatbox que nos incluía una cena en el restaurante Rebotica y estuvo todo riquísimo sobre todo las croquetas de perdiz y boletus.

Atención buena, solo fuimos una noche y estuvimos muy bien, el dueño tiene su restaurante donde hace las comidas y la cena que tienes que avisar pero súper buena la comida, el mini bar de la habitación muy bien de precio,
Lo recomiendo y volvería

La casa muy bonita y muy limpia, nuestra habitación muy completa, nos gustó mucho. Pasamos el fin de semana en pareja y nos encantó. Por poner alguna pega hay poca luz, sobre todo en el dormitorio,voy un calefactor no funcionaba pero con el otro era suficiente. El trato muy amable con el dueño y con la mujer que preparaba el desayuno. La casa tiene restaurante pero ojo que abre tarde, nosotros pensamos que estaba cerrado. Y en el mesón que hay al lado hay que reservar, estaba siempre lleno.

Una casa del siglo XVI muy acogedora, las camas cómodas, la madre de Paco, que es con quien hemos tratado mas es una mujer encantadora.
Lo único que hemos echado en falta es alguna silla en la habitación. Por lo demás estamos muy satisfechas.

Hola, mi marido y yo hemos estado alojados este fin de semana pasado en el Atroje, en la habitación con la bañera de hidromasaje que hace esquina y ha sido todo maravilloso. Es cierto que los techos son bajitos porque es la buhardilla de la casa, y si piensas alojarte allí 1 semana, pues no es cómodo/practico, pero para hacer 1 o 2 noches, con un ambiente totalmente rustico y romántico, es ideal. Teníamos incluida también la cena y el desayuno y ni siquiera pudimos acabárnoslo todo. Recomendable 100 x 100.

Fuimos con una Wonderbox. GENIAL y me quedo corto. La habitación una chulada, con chimenea, la cama super cómoda y muy amplia. La zona muy tranquila, estaban de fiestas de Los Quintos y no se oía nada. El anfitrión de 10, muy simpático y atento. Te prepara un desayuno buenísimo y muy variado. Teníamos las venas incluidas en el pack, que se sirven en el restaurante del anfitrión. Menú cerrado, pero espectacular. Y encima petfriendly, fuimos con nuestros peques. Volvería sin dudarlo.

La habitación es preciosa, cómoda, grande con chimenea. Hemos estado 4 personas muy a gusto. El trato del propietario excelente, ademas teniamos el desayuno y la cena en el restaurante La Rebotica y nos ha encantado. Volveremos.

Una casa rural muy acogedora. Tranquilidad, hospitalidad y todo súper limpio y cuidado. Recomendable totalmente. El entorno precioso

Una maravilla de casa rural, con todas las comodidades actuales pero preservando la esencia de las casas de pueblo de toda la vida. Un entorno natural espectacular para hacer senderismo y disfrutar de la naturaleza. El trato personal maravilloso y unos desayunos espectaculares. No dejar de visitar el restaurante la rebotica, comida casera tradicional de calidad

Estuvimos tres días en la habitación mejorana, una habitación con mucho encanto, cama muy cómodas, y tiene un apartado como salita, con sofá cama tele y la chimenea, y sale a un balcón pequeño. Me encantó. El desayuno es continental y está muy bueno, con su pan tostado, sus mermelada, bollería y su zumo. Es un placer haber conocido a la mujer que sirve los desayunos un encanto. Si tuviera que poner alguna pega diría que la cisterna se atasca, por lo demás todo fenomenal, ahh en la época que fuimos (Agosto) es un acierto que haya en la habitación una neverita, donde poner tu botella de agua a enfriar.

Me gusto mucho que se haya mantenido el encanto de una casa tan antigua y tengas las comodidades q hoy en día se necesitan (aire acondicionado, chimenea) Todos los detalles muy cuidados. Pude llevar a mi perrita. Los dueños encantadores

Una casita con mucho encanto. Tuve muchas facilidades ya que canjeé un bono de smartbox y pude añadir sin problemas una cama supletoria. Hubo algún error en la web de smartbox ya que al efectuar la reserva , me llegó un correo después que decía que el propietario la había rechazado, lo cual era extraño ya que había hablado con él previamente por teléfono para conocer las condiciones. Me confirmó la estancia en la fecha de deseada sin problemas. Además aceptan mascotas lo cual es un plus. Estuve en la planta de abajo y tuve la suerte de no tener vecinos por lo que muy tranquilos. La habitación es oscura ya que en esas casas antiguas de piedra los ventanales son más pequeños, pero como se trata de descansar, es ideal. El desayuno es muy completo y el pueblo tiene una gastronomía muy rica. Aconsejo comer en el Restaurante La rebotica, gestionado por la misma familia. Platos 100% manchegos.

Al entrar sentí un poco de miedo al ver todo tan antiguo, pero luego vi el encanto. Me teletrasnporte unos 100 años atrás.
Todo de la época cama, cerraduras, chimenea etc. Nunca había estado en algo así
Nos gusto mucho

Fuimos a finales del julio pasado, una gran experiencia. La habitación encantadora, al igual que los vecinos, muy simpáticos y extrovertidos. Como no había tienda de recuerdos en el pueblo, compramos una barra de pan para la familia en una panadería tradicional, probablemente la mejor que hayamos probado. Un pueblo pequeño pero con mucha vida, 100% recomendable!

Fantástico espacio, cálido, acogedor con todo lo necesario para disfrutar del descanso, el relax y el buen comer.
Pueblo ubicado en un espacio natural precioso.
Muy buena acogida y atención por parte de los dueños de la casa rural y el restaurante la Rebotica, donde se come de categoría y va acorde en el estilo de la casa rural.
Repetiremos.

Fin de semana con un wonderbox. Ningún problema para canjearlo y qué decir del sitio elegido, fue maravilloso todo, la comida, la habitación, la amabilidad de los anfitriones, todo.

El trato por parte de los dueños fue estupendo. No dispone de sala común o comedor. Para comer, si su cocina está cerrada, los dueños disponen de un restaurante en el propio pueblo, muy cerca. Comida de la zona a buen precio.

Fuimos con un pack de Aladinia que incluía una noche, desayuno y cena en un restaurante del pueblo, cerca de la casa. Nos gustó mucho el sitio, calidad-precio recomendable para una escapada en pareja!