Ermita de San Nicolás

La ermita en sí no es más que unas ruinas del edificio original construido a la vera del Camino de Santiago en su variante de la costa.
Un rincón pintoresco más dentro de un paseo excepcional por el camino de la Punta del Brusco que coincide con este tramo de la ruta Jacobea.
Muy recomendable si estás por la zona, la naturaleza exuberante de la región está bastante bien conservada en un estado semi salvaje, aunando el monte y la playa en un mismo lugar.
Además su recorrido prácticamente plano no ofrece dificultad alguna, apto hasta para ir con carrito de bebé.
Precioso como toda la región.

Ruinas con mucho encanto. S. Nicolás se merecería más protección. Lástima q permitieran construir casas tan próximas...

Está en muy mal estado pero justo detrás, sin estar a la vista de la carretera hay unos bancos para poder descansar o leer. Es un sitio muy tranquilo y poco transitado, lugar perfecto para descansar en verano por las sombras de los árboles. Ideal para las personas que hagan el camino de Santiago para recuperar fuerzas.

Muy bonita pero es una pena el estado de conservacion.
Un lugar tranquilo para un merecido descanso.

Está en ruinas. Donde se encuentra hay un bonita senda que recorre en paralelo el mar y la montaña. Bien para relajarse y disfrutar de la naturaleza.

Le doy un tres por el mal estado de conservación, podría estar más limpia la zona y más visible lo que son las ruinas de la ermita.

La ermita de San Nicolás ya se cita en documentos medievales, aunque la construcción actual se situaría a fines del siglo XVI. El edificio, hoy en ruinas, presenta una capilla mayor con bóveda de crucería a la manera gótica. el arco triunfal y la nave tenían una estructura clasicista.

Buenas