Casa rural Al-Mofrag y apartamentos el Mirador de Monfragüe

Very nice atmosphere. Simple, clean and hospitable. Excellent breakfast.

Expectacular

La mejor casa rural para quedarse en el Parque Nacional de Monfragüe. Los dueños son majísimos y están a tu servicio completamente. Nos dejaron de todo, toallas, jabón, sabanas y mantas. Los baños son todos muy grandes y muy bien. Tienen cocina equipada con todo, horno, microondas, lavavajillas y lavadora. El salón está muy bien.

Parada obligatoria si vas a visitar el parque de Monfragüe.
Nos alojamos en la Casa Rural Al-Mofrag un fin de semana, muy recomendable si quieres conocer el parque en profundidad y hacer las rutas que hay disponibles en la zona.
En el chiringuito, el desayuno tienen desde tostadas hasta huevos con bacon que para coger fuerzas por la mañana está fenomenal. La comida recomiendo el cachopo con patatera y queso… espectacular. La hamburguesa de ciervo también estaba muy buena. El postre, la tarta de queso y.. la mejor torrija que he comido!!
En resumen, calidad precio muy buena y la atención del servicio impecable (muy atentos y cualquier cosa te lo solucionan al momento). Volveremos!!

Bonita casa rural enclavada en pleno parque nacional de Monfrague. Justo al lado de la casa, por las noches suelen venir varetos, ciervos jóvenes, a pastar la hierba fresca

La casa rural está impecable. Tienes cocina completa para poder cocinar compartida pero con todo lo necesario. Zonas comunes en interior y exterior. Y el trato de los trabajadores excelente. Los tintos de verano impresionantes con una gran elaboración jaajajaj la verdad es que estamos deseando repetir. Cómo pega diría que me gustaría que aceptarán perros para la mayoría de nosotros son un miembro más de la familia... Y total de seguro que más de un animal de dos patas habéis tenido ya! Jajajaaj. 100% recomendable. Volveremos seguro!!Gracias por todo!!

Sitio especial para vivir la naturaleza muy cerca.
Hay miradores desde donde se vé el río Tajo.
Se pueden hacer rutas de senderismo en las que puedes encontrarte con diversa fauna,... águilas, buitres, ciervos...

Estuvimos 2 adultos y una niña de 2 años en habitación con zonas comunes compartidas pero que pocas veces encontrabas a alguien. La estancia muy bien, limpia y con vistas al campo. Muy bien también la localización en pleno parque para moverte en coche o partir a pie desde las rutas que empiezan allí mismo. Tiene piscina que nos vino fenomenal y el chiringuito también fenomenal con una gran terraza y unas chicas majísimas! Y se come bien. Para volver a buscar la tranquilidad allí, también es un gran destino en tiempos de Covid. Volvería sin dudarlo.

Estuvimos un fin de semana, al llegar nos atendió Alba, hija de los propietarios, nos puso en la habitación Lince Ibérico, para ella la mejor. Habitación muy espaciosa, con dos ventanas a dos fachadas, con vistas al campo. Limpia y cómoda. Muy buena atención de Alba, así como de su padre en los desayunos. Desayuno completo, zumo de naranja, café con leche, pan recién hecho, aceite de oliva, tomate, mantequilla y mermelada para untar, chorizo y queso de la zona, bollería, todo muy bueno. Tienen un bar frente a la casa rural que se llama El Chiringuito, buen sitio para pedir algo de picar después de hacer una ruta de senderismo. Hay variedad en raciones de la gastronomía de la zona y bocadillos variados. Si volvemos por la zona iremos sin duda a esta casa rural. Enhorabuena a los propietarios por llevar tan bien el negocio.

La casa fenomenal, en pleno parque Nacional, una pasada. Muy amables con todo, la comida muy rica también. Volveremos

Muy buen sitio para comer, tanto en el interior como en el exterior. La ración de queso de oveja, espectacular y grande. Pedimos presa, muy bien hecha y chuletón, en su punto, sin sangre. Ambos platos acompañados de patatas fritas y guarnición. Todo regado con unas copas de Paiva. De postre se les habían acabado las natillas de chocolate.

Casa rural súper cómoda, bien equipada, amplia y muy nueva. La cocina es compartida, totalmente equipada para usarla en horas de cena o almuerzo, siempre todo muy limpio, el servicio de limpieza pasa a diario.
El trato de los dueños es familiar, atento y bueno.
El lugar es clave, tanto para hacer rutas in situ, como para desplazarse a pueblos o ciudades de obligada visita cuando se viaja al norte extremeño. Aparte de ofrecer el privilegio de alojarse en pleno parque natural.
Las vistas son una maravilla, de día montes verdes y de noche observatorio astronómico con solo tumbarte en las mesas de madera tipo merendero que hay tras la casa, en plena oscuridad se aprecian las constelaciones y estrellas fugaces como si estuvieras a pocos metros del cielo.
Hay avistamientos de aves y animales constantes, de noche la aldea se mina de ciervos, y es un deleite verlos campar a sus anchas.
La seguridad allí es constante.
Recomendable 100%

Trato exquisito y familiar. Habitaciones limpias, espaciosas, luminosas y con baño muy amplio. Ambiente tranquilo y agradable. Lugar ideal para visitar y vivir unos días muy relajados. Entorno ideal para los amantes de la flora y fauna. En suma, merece la pena una visita.

Están muy bien las habitaciones, acogedores y limpias.

Están geniales, muy limpios, la comodidad de la cama es impresionante.
La dueña atenta, siempre pendiente.
Cada vez que vuelvo , mejor que la anterior.

Precioso lugar. Ideal para desconectar, rodeado de campo y naturaleza. El trato es inmejorable. Tanto Mariteo como Faustino y el resto de la plantilla hacen que la estancia sea perfecta.
Recomendable

16 personas estuvimos un fin de semana alli, y tanto el trato del personal, como las facilidades para todo fueron geniales, a la vez que se podian ver a los ciervos enfrente de la casa por la noche, fue espectacular

Buen precio. Limpieza. Situación inmejorable. Ideal para familias, grupos de amigos. Los niños pueden jugar en los alrededores tranquilamente. Estancia en general muy agradable. Lo recomiendo y volvería.

Un sitio magnífico para degustar carne de la zona y disfrutar de la amabilidad de sus dueños. Volveremos

Buen sitio para tomar algo en medio del Parque Nacional. A pesar de que había bastante gente, los camareros fueron en todo momento muy atentos, que es una de las cosas que más valoro en este tipo de establecimientos.