Museo Arenas de San Pedro

Un sitio con mucho encanto y un servicio de 10. Comida de calidad, casera, deliciosa y a buen precio. Muy recomendable, volveremos.

Un rincón encantador, con un personal más que agradable siempre atentos con nosotros. Toda la comida excelente, jarras de cerveza generosas y en una terraza acogedora.

Lugar tradicional perfecto para pasar una tarde junto a la chimenea, observando los aperos de labranza y echando una conversación con la gente de la zona. La dueña muy amable y cercana nos hizo varias recomendaciones en cuanto a las tapas y finalmente cogimos gambas al ajillo, patatas revolconas y salchichas, suficiente para cenar dos personas. Recomendable

Un lugar estupendo con la gente muy amable y el trato excepcional. La comida de casa - recomiendo

Llevamos años veraneando en Arenas de San pedro y por fin pude comer las auténticas revolconas, las gambas al ajillo riquisimas y las sardinas tremendas, pero lo más agradable fue la Dueña y su hermano que pasamos una tarde rodeada de gente normal, el museo una pasada, una vuelta al pasado preciosa. Gracias!!

La verdad es que comimos de puta madre por muy buen precio y muy bien servidos... la única pega es que había unos parroquianos con un torrente de voz que dejaban sordo a cualquiera que hubiese a 30 metros a la redonda... ¡Dadle de comer a ese hombre pa que no hable!

El ambiente junto a la estufa y el fuego en invierno es estupendo, aunque casi mejor la terraza en verano con las sardinas a la parrilla. Además es pet friendly!

Llevaba mucho tiempo sin visitar Arenas y por casualidad entramos.
Lugar con encanto precioso y seguro que con muchas historias y anecdotas.
He leido las reseñas y seguro que volveremos a probar las patatas revolconas y raciones con productos de temporada.
Nos ha encantado tanto el trato de la .dueña como el lugar.

Cenamos muy muy bien, a base de toas generosas. Las revolconas, croquetas y lo más impresionante: tapa de temporada, níscalos. Todo riquísimo, la dueña un cielo. De verdad, muy recomendable y el sitio espectacular como pequeño museo. Para nada de acuerdo, con las reseñas negativas.

Excelente local para tomar ricas raciones caseras. En nuestro caso, elegimos revolconas y migas. Nos gustó mucho la decoración rústica del local, con todo tipo de detalles rurales. También la comida, a precios más que asequibles. Especial mención a la atención recibida. La persona que atendía nos aconsejó no pedir 3 raciones, sino 2. Cosa que agradecimos mucho, por la cantidad tan generosa de cada una de ellas. 100%RECOMENDABLE.

Inesperado rincón en Arenas, restaurante/bar regentado por dos hermanos con platos d muy buena calidad y trato cercano e inmejorable. Las revolconas y las migas como las d la abuela pero el cochinillo y el revuelto d setas impresionante. Para repetir y repetir

Singular y espectacular. Un sitio precioso lleno de herramientas q ya no se ven. Terraza de verano muy bien ubicada y cerca del puente romano. Las tapas y raciones no dejan indiferente. La atención fabulosa. Recomendable 100 x100.

Buena experiencia. Platos bien servidos y de buena calidad. Atención correcta.

Así sí.

Sitio muy curioso donde poder ver antiguas herramientas de labranza y campo mientras tomas algo. Pedimos un botellín y un trina y nos pusieron una tapa de callos muy rica. Todo por tres con diez, muy bien de precio. Baños limpios.

Muy buen sitio para comer y trato excelente

Trato inmejorable, comida de 10 y buenos precios

Buen servicio, comida estupenda, decoración muy característica y a buen precio

Ensalada de tomate magistral, gambas al ajillo perfectas, boquerones en vinagre caseros y cochinillo en su punto. Perfecto, totalmente recomendable. El señor camarero un poco estanco....

Bar de tapas. Precio asequible. Local en el que se exponen aperos de labranza y objetos tradicionales, con mucho arte y amor. Trato amable.

Hay limpieza y amabilidad Hace tiempo que no comía unas bravas y un cochifrito tan buenos