Camberalmar

Fuimos a Cantabria a pasar unos días en familia con unos amigos. Nada más llegar nos impresionó la fachada, una casa solariega típica cántabra, con sus cristaleras, artesonado de madera y techos de madera. Los apartamentos son increíbles, muy bien distribuidos. En la parte de abajo posee una cocina americana con todo el menaje completo, sartenes, cafetera, vajilla para seis personas, tostadora, horno, lavadora, microondas,...a continuación un salón amplio, mesa para comer, una zona de lectura al lado de una cristalera con unas increíbles vistas al campo y en la parte de arriba dos alcobas, matrimonio y otra habitación para los peques con dos camas y el baño. Todo perfecto. Limpieza impecable y la dueña Marina, simpatiquísima. Nos recibió con un estupendo regalo de la zona, unos sobaos cántabros y nos despidió con varios productos de su huerto.
El apartamento es increíble, con una zona ajardinada perfecta para los peques, barbacoa, parrillas, mesa para comer...además posee un parque al lado y zona amplia de parking.
Los apartamentos están cerca de unos acantilados a escasos metros y cerca de Santillana, Playa de Oyambre en Comillas.
La estancia ha sido increíble. Gracias