Monasterio De San Pedro de las Dueñas

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El Monasterio de San Pedro de las Dueñas se construye entre el siglo X y XI. Su Iglesia de estilo románico - mudéjar, se comienza en piedra y se acaba en ladrillo. De planta basílical.
Una torre construida de ladrillo.
Un interesante capitel en el interior de la Iglesia conocido como "las siete monjas".
Un Cristo Crucificado de Gregorio Fernández en su interior.
Las monjas benedictinas, elaboran pastas artesanales muy ricas.

Construido a finales del siglo X y principios del XI. Es una de las iglesias más representativas del románico mudéjar de la fase preclásica, se comienza en piedra y se acaba en ladrillo (1087 y 1110), y el exterior es de planta basilical. Sobre el presbiterio de la Capilla Mayor se alza una torre totalmente de ladrillo, es de planta cuadrada y de sección decreciente. Destaca una colección de capiteles, el más curioso es el conocido popularmente como 'de las siete monjas', y en la cabecera de la iglesia destaca un Cristo de Gregorio Fernández.

Interesante muestra del arte románico-mudéjar, muy bien cuidado y atendido por las monjas del Monasterio. Extraordinarios capiteles y hermosísimo crucificado atribuido a Gregorio Fernández. Una monja atiende a los visitantes en la entrada y ofrece una guía bastante bien realizada por tan sólo 2 € y también los dulces que elaboran ellas mismas.

Muy bien conservado.
En uso por las monjas Benedictinas.
Muy rica las pastas artesanales

Es una iglesia pequeña, austera y recogida. Destacan sus capiteles y un Crucificado. Al ser de clausura no se puede visitar el resto del edificio. Sin embargo, está lejos y muy retirado de las rutas turísticas usuales. El horario depende un poco de las necesidades de la clausura y no es muy fiable. Por ello antes de ir merece la pena plantearselo

Sorprende una iglesia tan bonita este como escondida
Según los lugareños la iglesia era más grande y perdieron terreno... Y el retablo.. Etc aunque así a conservar mucho, los bancos son preciosos

Las monjas te cobran 2€ por verla pues voluntariamente las tienes que comprar un panfleto

Las pastas muy ricas

Super agradables y amables , me han dado incluso de comer sin pedirlas nada....🥰🥰🥰

Un lugar precioso. Unas monjas encantadoras que hacen unos dulces riquísimos.

Por premura de tiempo no pude entrar y ver la Iglesia. En un mes iré nuevamente por la zona y lo haré. Si compré canutillos y pastas. Una delicatessen. Para repetir sin duda

Llegamos y nos encontramos todo cerrado. Don Gaspar, muy amablemente nos indicó que había que aguardar al rezo de la congregación religiosa y que luego nos enseñaría la iglesia. Así fue.
Si no tiene otras tareas vinculadas con sus obligaciones sacerdotales te muestra todas las maravillas que encierra la iglesia.
Gracias.

Una restauración que hace resaltar lo más bello. Un entorno amable y encantador.

La iglesia es muy bonita, muy bien conservada. Destacar los capiteles en especial el de las tres monjas

Unos capiteles espectaculares. Suerte encontrarnos con el cura, porque nos abrió la iglesia y lo que iba a ser 5 minutos llegaron a ser 30 con explicación y todo. Gracias. La llave se debe pedir a una señora que vive cerca. Las monjas venden pastas.

Magnifica iglesia del románico/mudéjar; dentro tiene una estupenda colección de capiteles y una de las mejores esculturas del arte español: el cristo crucificado adjudicado, no está documentado, de Gregorio Fernández. Antiguamente, la primera vez que fui siendo pequeño, estaba colgado en el centro del ábside y la visión era impresionante

Ruhige, konzentrierte und ästhetische kleine Klosterkirche. Scheint aber eher nicht auf Besuche eingerichtet zu sein, meiner Bitte, dort fotografieren zu dürfen, wurde sehr erstaunt stattgegeben.

El lugar es precioso, las monjas muy amables y sus pastas buenísimas

Simple y austero pero con una arquitectura impresionante

Un lugar precioso y recogido para encontrar la paz y al Señor. Un edificio impresionante y una comunidad religiosa que lo cuida a diario.

Muy amable la monjita que me deji enttar a la iglesia