Ermita de Santa Maria de Melque

Wonderful the church itself, its history and the landscape around.

A must visit for anybody interested in the history of Spain. The last time I visited it some 20 years ago it was abandoned and a little worse for wear. Thankfully it has been cleaned and full restored to its former glory.

It is a must be visited is a Visigoth building

Espectacular!!!!. Tuvimos la suerte de poder celebrar la boda de mi hija en esta maravillosa ermita. Fue un momento mágico por el ambiente que se respira dentro de estos muros. Sobrecoge su majestuosidad así como la intimidad que proporciona. Desde luego, el mejor sitio para una celebración, pero también uno de los lugares a visitar sin ningún lugar a dudas. Enhorabuena al consistorio que lleva a cabo su mantenimiento y rehabilitación

Es un conjunto monástico visigodo, del cual pueden visitarse la iglesia, que ocupa el centro del complejo y el centro de interpretación. Aunque está un poco retirado, merece la pena acercarse y disfrutar admirando el que es uno de los monumentos mejor conservados de las España altomedieval. El paisaje que la rodea, característico de la zona, tambien es digno de admirar. Se puede acceder con coche.

En el crepúsculo del dominio visigodo en la península ibérica, el aire se espesaba con rumores de traición y conspiraciones. El rey Rodrigo, sabiendo que su reino colgaba de un hilo, convocó a sus consejeros más leales en el enigmático sitio de Santa María de Melque, una estructura solitaria anidada en los Montes de Toledo. Allí, rodeado de antiguos muros que resonaban con ecos de un pasado glorioso, Rodrigo reveló su plan para salvaguardar un tesoro de inestimable valor, legado de generaciones de reyes visigodos.

Mientras tanto, al sur, en las tierras de Ceuta, el conde Julián, consumido por un rencor personal contra Rodrigo, fraguaba una alianza con Tariq ibn Ziyad, un comandante musulmán ambicioso y astuto. En una noche sin luna, Julián guió las naves de Tariq a través del estrecho de Gibraltar, entregando la llave de la península a los invasores. Las tropas de Tariq, con el fuego de la conquista en sus ojos, avanzaron rápidamente hacia el norte, arrasando con resistencias dispersas y sembrando el temor entre los pobladores.

Rodrigo, al recibir noticias del desembarco musulmán, se dirigió al Castillo de Montalbán, una fortaleza imponente que se erguía como guardián de los Montes de Toledo. Allí, esperaba reunir a sus fuerzas para un último y desesperado enfrentamiento. Sin embargo, antes de partir hacia la batalla, en las sombras de la noche, Rodrigo y un pequeño grupo de leales llevaron el tesoro desde Melque a través de un antiguo sendero oculto en el bosque, destinado a un lugar de descanso secreto que solo unos pocos conocían.

La Batalla de Guadalete selló el destino de Rodrigo y del reino visigodo. La leyenda cuenta que, mientras las hordas de Tariq celebraban su victoria, el tesoro de Rodrigo permanecía escondido, custodiado por los espíritus de los Montes de Toledo, en un lugar cuya ubicación exacta se perdió en las brumas del tiempo.

Años después, los ecos de aquel tesoro perdido resonaban en los corredores de Santa María de Melque y las murallas del Castillo de Montalbán. Aventureros, buscadores de tesoros y estudiosos trazaban mapas y descifraban antiguos manuscritos, esperando descubrir los secretos que Rodrigo había enterrado. Se rumoreaba que existía un sistema de túneles conectando Melque y Montalbán, una red subterránea donde el tesoro podría haber sido trasladado durante la confusión de la invasión.

Hoy, Santa María de Melque y el Castillo de Montalbán siguen en pie, monumentos misteriosos a una era de reyes y conquistadores, custodiando silenciosamente la historia y los secretos de un tesoro que quizás nunca sea encontrado, perdido en las leyendas y el polvo de los siglos.

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Nada de lo dicho anteriormente es real. Tan solo son unos parrafos de ficción, que salieron a borbotones de mi mente al conocer este enigmático y al mismo tiempo fascinante lugar. Una joya a poco mas de media hora de toledo. Merece mucho la pena. Imperdible tb el castillo.

Una visita 5 estrellas para mi, poder tener la suerte de visitar un lugar así es un privilegio, se trata de un conjunto monastico del S. VII, Visigodo, la estructura exterior es de una belleza primitiva, el trabajo de los sillares de piedra que conforman la Iglesia es único, y cuando entras se respira un silencio y una paz indescriptible, todo lo conforma la piedra, en el edificio contiguo hay una exposición sobre el Conjunto Visigodo que representa este lugar, una visita obligada, un acierto seguro.

Un curioso lugar, representación de una primitiva iglesia visigoda, implantada sobre los restos una antigua villa romana, Una pequeña exposición cuenta su historia y evolución hasta hoy; se acompaña con un video explicativo de la iglesia y alrededores. La visita es gratuita.

Santa María de Melque se encuentra en el término municipal de San Martín de Montalbán en la provincia de Toledo. Fue un conjunto monástico construido entre los siglos VII-VIII, en las cercanias de la capital del reino visigodo: Toletum (Toledo).
La iglesia se encontraba en el centro de este gran conjunto monástico como se puede deducir se los pocos vestigios que quedan.
Parece ser que después de la conquista islámica, fue habitada por una comunidad mozárabe.
Con la conquista de Toledo por Alfonso VI en el año 1085, la iglesia recuperó su función cristiana.
Con la desamortización de Mendizábal fue definitivamente abandonada hasta el punto que llegó a desempeñar la función de establo y pajar hasta bien entrado el siglo XX.

Un lugar muy interesante y muy bien acondicionado para el visitante.
La entrada es gratuita.
Se puede acceder con el coche hasta la misma puerta. El camino de acceso (2,5km) está muy bien asfaltado pero estrecho. Tiene una gran explanada para aparcar.
Dispone de merendero, oficina de información, una sala de exposiciones, un centro de interpretación (muy completo y muy bien presentado) e incluso aseos.
La ermita en si no es muy grande pero es majestuosa. Tiene rampas de acceso en vez de escaleras, lo que se agradece para personas con dificultad motriz.
Si consigues estar solo dentro mirando sus muros y sus altos techos, escuchando solo el trinar de los pájaros y el viento atravesando las ventanas, se crea una atmósfera increíble. Detrás de la ermita ahí dos pequeñas zonas de excavación donde han sacado a la luz antiguos cimientos.
Me ha encantado la visita y la trabajadora al cargo del lugar muy amable

Tiene un encanto especial, totalmente imprescindible charlar con Eduardo, un pedazo de artista, que te explica todo con tal entusiasmo que hace aun más especial el lugar. Muchísimas gracias 🙏🏼

Preciosa ermita visigoda en un entorno muy bonito y cuidado. La visita es gratuita. Tiene un centro de interpretación muy bien explicado que incluye un vídeo que aconsejo ver para entender y conocer la zona. Hay baños. Si estás por la zona, es visita obligada

Impresionante ermita visigoda con gran historia . Inicialmente construida en el siglo VII, pasó por la invasión árabe y la posterior conquista de Toledo , por el rey Alfonso VI de León. Innumerables historias y leyendas entre sus muros.
Un lugar digno de visita.

Un lugar para tomar contacto con nuestra historia, con la belleza y el silencio. Una iglesia única en su género y digna de ser visitada. Toda persona que decide venir queda gratamente sorprendida. Siempre está abierto, no importa qué día y la entrada es gratuita.

Fue bonito y encontrarnos con una fiesta Rociera.

Uno de los pocos monumentos de época visigoda que vamos a poder visitar.
Reformado en los últimos años, es impresionante entrar y dejarse envolver por el carácter ciclópeo de la construcción.
Existe un pequeño centro de interpretación conde descubrir todo lo relacionado con esta ermita así como el contexto y civilización visigoda.
Seguro que no os defraudará.

Se trata de loa restos de un monasterio de la época Visigoda, un visita muy recomendable. En el lugar hay un centro de interpretación donde te explican muy el monumento dentro del entorno de su época.

Es preciosa y está en un paraje maravilloso. Te ponen un audiovisual explicativo antes de la visita, en el centro de información, y la ermita es de libre acceso dentro del horario de visitas. Fácil para aparcar y llegar.

Un lugar muy bonito y con mucha historia, fácil acceso y bien señalizado. Se puede ver la ermita, una sala de exposiciones y un centro de interpretación, también hay unas mesas para poder sentarse a comer algo, todo muy limpio y bien cuidado, es una visita imprescindible.

Me ha parecido muy interesante su construcción y la historia sobre los visigodos del centro de interpretación. La visita es gratuita.