El lagar de los almendros

El cortijo es precioso, muy bien acondicionado. Accesible, fresquito...una piscina con unas vistas espectaculares. Las noches claras y mágicas con el cielo estrellado. Cocina muy bien equipada, camas cómodas, espacios amplios y frescos....y el personal de bienvenida y de mantenimiento muy amables y cercanos..repetiremos seguro.

Estuvimos en mayo de 2022. Muy buena experiencia tanto en la casa como en la región. Casa muy bien equipada con todas las comodidades posibles e imaginables. Muy buen trato con Pilar y Ricardo que nos han facilitado nuestra estancia. Una casa decorada con gusto en un lugar maravilloso con mucha tranquilidad. Idealmente situado para ir luego a Trujillo y visitar el pueblo y sus restaurantes. Una experiencia muy recomendable para reunirse con familia o amigos.

Acabamos de volver de un fin de semana en la casa, la estancia ha sido maravillosa. Una casa totalmente equipada, incluso wifi y con los extras del billar y la mesa de ping-pong que ha hecho las delicias de los más jóvenes del grupo. La piscina es perfecta, la hemos usado (a pesar de que las temperaturas no fueran las más propicias para el baño). Hemos estado tan cómodos que ya estamos buscando una nueva oportunidad para volver. La atención de Ricardo, la persona que se encarga del mantenimiento ha sido excelente y muy discreta. No hemos tenido ni una queja en estos días. Gracias a todos por hacer tan agradable nuestra estancia.

Hemos estado este fin de semana en la casa rural y ha sido un fin de semana muy agradable con la familia.
En todo momento la atención de los dueños ha sido magnífica, dándonos todo tipo de datos y recomendaciones acerca de la casa. Tanto equipamiento, zonas comunes, habitaciones, jardines, piscina… lo teníamos en mente antes de llegar porque tal y como nos lo describieron era en realidad. Hasta nos contó un poco de la historia de la casa y de como los hermanos se hicieron con ella para disfrutarla en compañia de la familia.
No podemos poner pegas, todo estaba limpio, ordenado, había enseres de todo tipo en la cocina, con electrodomésticos de sobra para hacerlo todo mucho más sencillo, ya que en muchas casas vas y no encuentras la mitad de las cosas para cocinar o simplemente para hacer un zumo o un café. Otro detalle que se agradece porque al llegar teníamos varias cápsulas para degustar de café nexpresso.
Para disfrutar del fin de semana el entorno es magnifico y el fin de semana que nos salió fue muy bueno para poder pasear por la inmediaciones e incluso acercarnos al pueblo. Si no querías salir, tenías la opción de echar una partida de ajedrez, cartas, juegos varios o hasta un villar que hay en la pequeña bodega que tienen en el sótano o un ping pong en la mesa que hay en el patio.
Tiene zona de barbacoa con un cenador hecho de obra en el que se puede tener una comida y una sobremesa disfrutando de las vistas o viendo como los niños disfrutan de la espectacular piscina de 15 metros de largo.
Para terminar, hablar de las habitaciones, muy amplias con camas king size comodísimas, con calefacción y baños, no se escuchan ruidos de la planta de abajo y se duerme muy bien. En todo momento estuvimos asistidos por el guardés que creo que se llamaba Ricardo, muy atento y servicial.
En fin, para repetir, trato exquisito y casa excelente. Cualquier pequeño detalle que pudieras no pasar por alto en otros sitios (unas copas para vino o cubata), aquí se ve eclipsado por el buen trato recibido.
Gracias.

La palabra que define esta casa es "funcional".
Habitaciones muy espaciosas y acogedoras, al igual que los espacios comunes.
Una piscina espectacular de 15 metros con una enorme zona de descanso con unas bonitas vistas a la finca.
La casa estaba equipada con todos los enseres imaginables (cocina, ocio, etc).
Como único inconveniente (por poner un pero) es que no todas las habitaciones tienen baño.
Por lo demás, una maravilla de casa con un servicio de atención al cliente impecable por parte de los encargados, que nos dieron todas las informaciones necesarias por adelantado, intentando adaptarse a nuestras necesidades en todo momento.

Teníamos claro que que queríamos ir algún sitio Extremadura, después de trastear un poco decidimos ir a la zona de Trujillo. Todo un acierto intuía después de pasar muchas veces por el puerto de Santa Cruz qué detrás de la Sierra que se ve al lado de la carretera tenía que haber más sierras y montañas, pero no imaginaba que fuera tan espectacular, así que nada llegamos al Lagar de los Almendros por un camino estrecho y tapias de piedras a un lado y a otro del camino, nos bajamos del coche y me di cuenta que estaba en un auténtico paraíso, la casa fenomenal espectacular, por la mañana nos levantamos temprano para dar un paseo por la zona es preciosa cogimos un manojo de espárragos. Por la tarde mi hermana me comento que había un libro de Julio llamazares en la entrada, la primavera extremeña, comencé a leerlo y resulta que Julio llamazares había pasado allí el confinamiento, me parecía todo como un poco mágico, un grande de la Literatura Española visita con cierta frecuencia la casa donde nos estábamos hospedando. Un fin de semana fantástico con toda la familia en un lugar maravilloso un paraíso natural.

Estuvimos en enero de 2022 en la casa y todo excepcional, la casa esta muy bien y el trato y amabilidad tanto de Verónica, como de Pilar y de Ricardo con los que tratamos fue estupendo, muy atentos. Las vistas son preciosas y el espacio natural muy tranquilo, ideal para pasar unos días de descanso, además está Trujillo muy cerca y a 40 minutos de Cáceres y Monfragüe, una localización perfecta.

Un precioso entorno muy cuidado y una casa rural impecable.
100% recomendada, agradecemos a Veronica, Pilar y Ricardo por sus atenciones y buena organización.

La casa muy agradable en un enclave muy bonito y rodeado de pueblos q merece la pena visitar’ la estancia del fin de semana ha sido buenísima en todos los sentidos .