Posada Adela

Special

Hemos estado genial durante los 5 días que hemos estado. Adela es un encanto y lo tiene todo siempre a punto. Habitaciones muy limpias y con vistas muy agradables, en plena naturaleza y a 3minutos del centro del pueblo. Desayuno completo por tan solo 5euros. Una piscina que te espera al final del día para relajarte. Nos ha encantado!

Ubicación inmejorable. En menos de 3 minutos andando estás en la zona principal del pueblo. Tiene parking, lo que es de agradecer.

Las camas son muy cómodas, y el desayuno muy rico.

No pudimos utilizar la piscina por el mal tiempo.

Todo muy limpio y decorado con gusto.

Desde nuestra habitación se veía el prado y las vacas, una sensación de tranquilidad absoluta.

Un lugar fantástico. Estuvimos con nuestro perrito en el puente de Mayo y Adela fue encantadora. Nos trató fenomenal, el desayuno estupendo y la ubicación inmejorable, en plena naturaleza pero a un paso del centro de Santillana. Si vuelvo a Santillana, sin duda me volvería a quedar aquí. Muchas gracias por todo Adela!

Casa rural atendida por Adela,un huracán de mujer,no para,es un encanto,no esperéis lujos, pero se está de lujo, todo muy limpio y agradable, pegado a Santillana del Mar, pero sin el agetreo del pueblo, bonitas vistas y muy buen enclave para moverse a cualquier punto de Cantabria.abstenerse exigentes en tema desayunos(están bien , pero son como los que te harías en casa)o servicios "vip". Pero lo dicho un lugar muy bueno para alojarse.

Lugar idílico tanto para las personas como para los animalitos.
Hemos pasado 4 días con nuestros 2 perros tienen un jardín muy bien cuidado y la piscina se agradece para el chapuzón de quitarse el calor.
Todo estaba muy limpio y el ambiente era muy familiar.

Repetiría.

Todo perfecto, Adela es muy atenta y lo lleva todo genial. Nos gustó poder llevar a nuestra mascota (Bicho). Si vamos a Cantabria de nuevo no dudaremos en volver.

Es uno de los sitios que estuvimos este verano y la verdad que voy escribiendo ahora poco a poco todas las reseñas.
El trato de la.dueña maravilloso, el lugar muy bonito y cuidado, el entorno precioso y que pudiésemos llevar a nuestra perrita y fuese tan bien recibida es algo muy bueno de este lugar... Sin duda volveremos el verano que viene!!! Pd: si no fuese poco me deje mis planchas del pelo y Adela se preocupó por ayudarme a que volviesen Conmigo!!! ☺☺☺☺

La semana pasada pasamos unos días en Casa Adela y fue todo estupendo . La casa de 10 . Adela una señora encantadora . Todo muy limpio . Nuestras perrita se lo pasó genial . Volveremos otra vez .

Es un lugar fantástico, con una ubicación privilegiada pegado al casco de Santillana. Adela es una anfitriona atenta y simpática. Las instalaciones excelentes y habitaciones enormes y acogedoras. Todo está muy nuevo y limpio. Para poner pegas hay que hilar muy fino, la insonorización de las habitaciones quizás no es la mejor y aunque el entorno es silencioso en mi caso tuve que sufrír un poco los ronquidos del vecino. En fin, minucias a parte: súper recomendable.

Hotel rural con piscina con desayuno tipo buffet libre. Situado al final del pueblo, al lado de la colegiata y de la calle principal, rodeada de praderas con caballos, vacas... ADELA, la propietaria, es de trato amigable y afable con los clientes, ocupándose de nuestro bienestar. Las habitaciones tienen buen colchón y buenas almohadas. Los baños con muestras de gel. Las habitaciones y los baños con decoraciones sencillas en tonos pastel. Mejorable: poner visillos en las ventanas para que permita entrar la luz sin necesidad de que te vean (pero eso también me lo he encontrado en un Parador Nacional).
Muy recomendable.

La habitación cuádruple con dos camas de matrimonio grandes, amplitud de la habitación (abuhardillada), el baño de grandes dimensiones con bañera en medio del mismo, muy chula. Colchones, ropa de cama, almohadas...todo limpísimo y comodísimo. Mis dos hijas, felices y ENCANTADAS con Adela que es de trato muy fácil y encantadora, sus gatitos... el desayuno y la estancia, de 10. Muy recomendable.

La ubicación es de diez: justo pegada al casco histórico sin estar dentro del mismo (evitando la masificación que hay durante el día), así como el entorno de praderas y silencio. Además, Santillana está cerca de numerosos lugares. En nuestro caso, aprovechábamos para visitar algún pueblo durante la mañana y comer por ahí, y luego ya pasar la tarde-noche en la posada.

En cuanto a la posada, tanto las camas como las almohadas son muy cómodas. Está muy limpia (lo hacen a diario) y tiene buen aparcamiento.

Por último, muy buena atención por parte de Adela. Es entrañable. En cuanto al desayuno, he visto algún comentario acerca de lo "básico" que es como algo negativo. Personalmente, nos gustó y tampoco vemos necesidad de más: tostaditas, aceite, tomate, infusiones, café y leche, zumo, bizcochos, mermeladas y mantequillas, jamón cocido y queso... Para nosotros, más que suficiente 😄😄😄

Lo mejor de la posada sin duda es Adela, nos ha hecho sentir superagusto, muy atenta y hemos disfrutado de sus conversaciones.
Muy cariñosa con nuestra perrita y la habitación además de muy acogedora, muy limpia.
Sin duda, volveremos.
El sitio y la casa es estupenda

Estancia maravillosa. Hemos alucinado con el nivel de limpieza, y con el trato familiar de los empleados. No puede estar mejor situado, y con aparcamiento en un pueblo muy complicado de aparcar.

El trato ha sido de 10! Adela es encantadora y te hace sentir como en casa. Su casita está genial, está muy cerca del centro y todo en la habitación está cuidado al detalle. Totalmente recomendable.

Alojamiento excepcional al igual que su dueña. La casa está muy bien localizada, muy cercana a la Colegiata pero muy tranquila, que permite ir y volver andando a cualquier parte de Santillana del Mar. Dispone de piscina que es un plus los días calurosos. Hospitalidad inmejorable por parte de Adela y lo recomendamos 100%

Adela y el personal encantadoras , trato inmejorable ,habitaciones limpias y amplias , desayuno copioso, buen ambiente , tranquilidad ,de noche solo se oyen los grillos ( para los que estamos acostumbrados al ruido de la ciudad en la noche ), es como viajar en el tiempo ,una piscina maravillosa .
Adela te informa de lo que necesites y te hace sentir como si estuvieras en casa , muchas gracias por todo , volveremos los gallegos 😉

La posada de diez y su dueña Adela te hacen estar como en tu propia casa.
Muy buena localizacion, zona tranquila y todo super limpio.
El desayuno genial.
Un acierto y sin duda repetiremos.

Trato inmejorable por parte de Adela y su familia encantadores, la casa preciosa y muy acogedora habitaciones grandes y espaciosas, todo muy limpio y cuidado sin duda para repetir, piscina barbacoa te hacen sentir como en casa el desayuno muy bueno, la situación al lado del pueblo pero a la vez rodeada de montañas tiene un encanto especial. Volveremos sin duda