Casa Bonifacio

No os perdáis este sitio. Ayer celebramos una comida familiar, todos los platos impresionantes: embutido casero, truchas, pollo de SU CORRAL (simplemente para llorar), y para concluir queso de "farraca" casero con miel. Simplemente te para perder el sentido. Y la atención exquisita, con Milagros a los mandos. No os lo perdáis porque sitios así, es casi imposible encontrar. Gracias Milagros.

Siempre es fantástico volver a O Courel, pero esta vez fue mucho mas especial; pocas veces he podido venir desde que me mude de Coruña a Granada, y esta vez vinimos en Semana Santa, acompañados de un puñado de buenos granainos que no conocían la zona. Desde el momento en que reservamos ya se portaron genial con nosotros; la confianza que nos regalaron desde un principio no tiene precio; una vez allí siguieron las sorpresas: el hotel está en un entorno de ensueño, y se duerme genial. Tanto los amaneceres como las puestas de sol son un regalo, y no hay como despertarse con el canto de los pájaros alrededor, con una paz casi idílica.
Saliamos a caminar por O Courel, y al volver nos relajabamos en la pequeña taberna tomando una cerveza fresca antes de cenar, y sentados en la zona comun, en la misma donde cenabamos. Y por cierto, que comida mas buena... nos prepararon embutido y pan casero para las caminatas -cuando llegamos a Granada aun nos quedaba un poco de pan y embutido, y el pan seguia perfecto para comer, que rico estaba, como se echa de menos ese pan-; las cenas fueron de autentico lujo, todo cocina casera y de una calidad increble, unos chuletones magnificos, un caldo para morirse de gusto, una carne o caldeiro que quitaba el sentido, regado todo con un vino casero como solo se puede probar en un lugar tan magico como es la comarca de Quiroga.
Gracias Milagros y Lorena por tratarnos esos dias como si fuesemos de la familia, nos os podeis hacer una idea de lo felices que nos fuimos y de las ganas que tenemos de volver a haceros una visita. Todo lo que positivo que pueda decir de esos dias, creedme, se queda muy corto.

Descubrimos este maravilloso alojamiento en lo mas remoto de la ribera sacra buscando por internet un lugar donde poder ir a desconectar de todos estos lios y disfrutar de la naturaleza en estado puro.
Agradecer sobre todo la amabilidad y el trato familiar de sus dueños y agradecerles también que nos hayan dado alojamiento en esta actual situación de pandemia, de verdad muchas gracias por habernos acogido en su casa y abrirnos sus puertas como si fuéramos de la familia.
Sin duda alguna habrá que volver ya que la zona donde está situado es maravillosa.
Solamente el domingo de la que nos íbamos a medio día la niebla nos dejo contemplar ese maravilloso paraíso natural.
Muchas gracias por vuestra atención.

Hostal en una zona tranquila, simple, habitaciones limpias y con baño comodo. La dueña encantadora, cenas de comida casera riquísima y los desayunos completísimos.

Absolutamente todo. El recibimiento de Milagros,la abundante y exquisita comida,su atención, su amabilidad y su trato genuino y cercano.La habitación y el lugar tranquilo y para repetir

Por su buena comida por el buen trato por el paisaje por el entorno ideal para pasar unas vacaciones relajadas y tramquilas

Lugar encantador, con trato amable y muy buena comida casera. Para las especialidades, caldo o caza, hay que encargar con antelación.

Casa rural de toda la vida, con una atención estupenda de Milagros, que te hace sentir como de la familia, y con unos desayunos y cenas a un precio muy bueno

He llegado hoy, aparte de que el GPS nos jugó una mala pasada, he comido la empanada más rica del mundo.

Vistas espectaculares en los alrededores. Lugar tranquilo aunque bien comunicado. Trato familiar.

Todo muy bueno y trato familiar. Milagros cocinera espectacular 🎖

Esta un poco lejos pero vale la pena ....super tranquilo

Trato familiar. Comida do país, riquísima e auténtica.

Es in lugar muy bonito la gente muy amable y buena comida

Comida casera y riquisima. Volveremos seguro

Bonito lugar, tranquilo y la gente encantadora

Buen lugar y excelente comida e trato

Precioso lugar. Limpio y buen trato.

Milagros es un encanto y su familia también. Una casa familiar y relax

Me encantó , cómo estar en familia !