La era de Andres

Absolutely amazing! Wasn't expecting this at all!
It is very nice family, small restaurant with local products and just the most amazing terrace with even more beautiful view on the mountains. As we ordered things without even checking the price we expected it to be kinda pricey at the end especially how good the food was. But price is absolutely decent for the amount and quality food you get along with local crafted sidra and beers. Just big cheer up to this place! Absolutely worth the visit if you are around this region.

Fantastic in every respect! The quality of the treatment, the food, and the views - incomparable. Local products and great prices. I would recommend all my friends to visit.

Very nice place and friendly service..

Great view, good food and drinks with fair prices

Nous avons adoré. Charmant accueil, cadre somptueux , cuisine simple de grande qualité ,faite maison(si c'est pas le cas, c'est rudement bien imité,mais j'ai aucun doute à ce sujet).
La carte des menus est traduite en anglais et en français
Les aigles qui passent à quelques mètres,le Pic Cotiella qui nous fait face,une grande terrasse...le top!
Il faut se garer sur le parking en contrebas de la route juste avant l'intersection qui descend à Santa Maria.

Estupendo para ir a comer, cenar o tomar una cerveza. Unas vistas increíbles. Comida casera, abundante y sabrosa. Carta reducida con productos de gran calidad. Se puede estar con perro en la terraza.
Atención maravillosa 😊
Para comer por veintipico con postre, bebida y café

Impresionantes vistas, comida casera (platos combinados, tapas y postres) y muy amables. Se puede ir con perros. Buenas vistas desde todas las mesas de la terraza. Visita obligada si pasas por la zona.

Lugar muy tranquilo y con unas vistas espectaculares. Trato familiar. La carta no es muy extensa, basada principalmente en platos combinados con diferentes carnes a elegir y algunas raciones más. Calidad buena y postres caseros. Que más se puede pedir si además tienes un espectáculo gratis de aves rapaces sobrevolando el cielo.

Muy buen sitio para comer en un entorno precioso. La familia que lleva este pequeño restaurante es muy atenta, amable y agradable. El milano, que pasa volando por encima esperando a que la dueña lo llame, hace de este lugar, un sitio aún más especial. Volveremos sin duda.

Un pequeño restaurante super agradable en plena naturaleza. La carta es reducida, pero todo es casero y riquìsimo. Los dueños nos atendieron con mucho cariño. Las vistas de Ordesa espectaculares. Sin duda un lugar especial.

Llegamos sin reserva y nos atendieron amablemente. Nos comimos platos convinados y la verdad que la cantidad de comida más que suficiente y rica. Es recomendable reservar previamente, ofrecen caldereta, pollo asado ..... las vistas del sitio ESPECTACULARES!!. Y la atencion de 10.

Fantástico sitio para almorzar o comer. Una ensalada, algunas raciones y un buen plato de huevos fritos, patatas y carne a elegir (cordero, panceta, chorizo, etc). La terraza es un buen mirador del valle del Cinca. La familia que lo gestiona es encantadora.

La mujer que nos atendió era encantadora, un ambiente muy familiar. Además de unas instalaciones preciosas con unas vistas únicas.
En cuanto a la comida, comimos algo muy simple pero estaba rico.

Excelente lugar para comer o tomar algo con unas vistas increíbles. La carta es corta, raciones generosas y de mucha calidad. La familia que lo regenta son encantadores.

Muy buen sitio para tomar algo, por las vistas tan bonitas, por el trato tan bueno y por las tapas que estan muy buen hechas. Estaba lloviendo pero queriamos comer fuera, nos pusieron una sombrilla y nos quito el agua. Lo recomiendo 100% tambien buen precio.

La comida INCREIBLE. El personal genial! Las vistas sin palabras…. Hemos visto hasta Águilas mientras comíamos. Bar familiar de toda la vida… de los mejores en los que hemos comido!!!!!

Una maravilla de sitio y una maravilla la gente que lo lleva. Después de varias malas contestaciones en tres restaurantes de la zona, hemos llamado por teléfono para comprobar si nos podían atender y desde el primer segundo nos encantó aun sin haber llegado.

La chica que nos ha servido ha sido un auténtico amor con nosotros y la cocina casera que practican realmente fabulosa.

Además, las vistas son un auténtico privilegio y hemos tenido la suerte de disfrutar de un espectáculo de cetrería totalmente improvisado gracias a la visita de un milano real que merodeaba la zona y a la que la camarera ha atraído con unos trozos de carne cruda.

Regresaremos sin duda.
¡Muchas gracias, familia!

Comida buena a precios exageradamente baratos a lo que te cobran en cualquier sitio con esas vistas o similar
Comimos rodeados de aves (águilas/halcones y buitres)
Con vistas a la montaña y con la sensación de acantilado
Prácticamente en plena naturaleza.
Comimos tabla de quesos.
Patatas bravas, croquetas (enormes) caseras muy buenas, ensalada y plato combinados.
Todo estaba muy bueno y el servicio muy bien.
Lo recomendados sin duda y si volvemos por la zona repetiremos.

Lugar de total paz y tranquilidad con unas vistas IMPRESIONANTES, perfecto para cenar unas tablas de quesos de la zona exquisitas acompañado de cervezas artesanas Rondadoras mientras la luna se alza majestuosa por las montañas. El trato amable y cercano de Quinita y su hijo que elabora unos postres caseros muy ricos, nos hizo volver a comer a la sombra de una morera con la peña montañesa como testigo un pollo guisado criado por ellos delicioso acompañado por una ensalada de verduras de su huerto mientras los buitres nos sobrevolaban una experiencia qué sin duda repetiremos en nuestra próxima visita al valle.

Un sitio espectacular para comer, una terraza con vistas única y la comida muy buena, todo casero y un trato familiar. Para repetir siempre que vengas por la zona.