Paredón del Milagro

Paredón del Milagro Este imponente muro romano ha estado siempre a la vista en Alcalá. Sabemos que en el siglo XVII se celebraban en su entorno ceremonias religiosas de culto a los santos Justo y Pastor (las fuentes recogen que, a veces, se aparecen a los presentes, quizá de ahí el apelativo "del milagro"). Aún se celebró culto hasta la década de 1990, protegido por una pequeña capilla desde 1968. La tradición le atribuía ser el "palacio de Daciano" (prefecto en Hispania en cuya época se desarrolló la última persecución de los cristianos) y lugar de martirio de los dos santos. Las excavaciones arqueológicas permitieron descubrir que el muro, en efecto, era la fachada de un edificio romano, precisamente una basilica judicial y edificio administrativo: un asombroso ejemplo de cómo la tradición ha venido manteniendo a lo largo de los siglos el recuerdo de la función de un edificio ya desaparecido