Casa de montaña "Eseija"

Hemos estado 4 familias el puente de diciembre y todo perfecto. Las vistas son increíbles, la casa está como nueva, la piscina interior estaba un poco turbia pero el dueño se preocupo de limpiarnos la durante todo el puente.
Nos ha encantado la casa tiene de todo, las camas nuevas y muy cómodas, la calefacción por suelo radiante es una gozada y un largo etcétera.
Por ponerle un pero los sofás son pocos para tanta gente pero pudimos solucionarlo.
Sin duda volveremos ya estamos pensando en hacerlo.

Espacios comunes amplios, con un futbolín, varios baños, piscina climatizada, barbacoa... Espectacular lugar. Todo ello en un precioso paisaje rodeado de actividades lúdicas natales como el Sky.

Muy bien, sobretodo para estancias de invierno, muy amplia y cómoda

Grande, equipada, ideal para un finde entre amigos

Buenas vistas, estupenda la casa y muy burn trato del dueño.

Casa muy bien situada, junto al pantano de Lozoya, Rascafria y El Paular, que goza de unas impresionantes vistas a la sierra madrileña y dispone de un inmenso salón, con una piscina y unas habitaciones muy bien climatizadas. Ofrece una total tranquilidad para disfrutar de unas estancias muy divertidas con nuestros amigos y la familia.
Habitaciones y decoración general de la casa / parcela algo básica.

La casa por dentro está muy bien, exteriormente muy escaso.

La casa tiene un salón espectacular, la calefacción por suelo radiante genial para el confort y los niños y no tiene goteras a fecha 1 de diciembre y eso que ha llovido a mares y ha nevado, pero en contra son los colchones que podrían llamarse colchonetas y la zona exterior que no existe porque no hay terreno para jugar y correr, también como he leído el menaje es muy precario. Volvería a ir sin dudarlo si mejoraran esos aspectos. Un saludo

Una casa rural de construcción moderna, apenas 2 años de antigüedad. Decorada mayoritariamente de Ikea, con un salón enorme muy agradable si estás en un grupo numeroso y quieres convivir en un solo lugar. Las plantas de arriba y sótano son para los dormitorios, que incluyen baño individual. He leído quejas de las camas, pero en mi opinión lo peor eran las almohadas, que son como troncos, por la forma y por la dureza. La casa apenas tiene espacio exterior, por lo que si quieres algo de aire fresco tienes que buscarte alguna excursión por la zona. La piscina interior no estaba caliente, más bien "del tiempo". En la sala hay una cantidad de humedad y calor enorme, no muy agradable, y el agua tenía una cantidad de cloro desmesurada. Era entrar y tener todos los ojos como tomates. Nos gustaron las instalaciones pero la casa no nos encantó. El entorno, eso sí, es muy bonito y se encuentra a una hora de Madrid Capital.