Casa Rural Txandia - Ollogoyen

A great house with everything you could need, very friendly hosts and some beautiful countryside and walks in the area.

Una maravilla. Estuvimos toda la familia celebrando las bodas de oro de mis padres y fue un acierto total. La casa tiene mucho encanto y es cómoda a pesar de ser antigua. El jardín precioso. Y los anfitriones encantadores. Nos sentimos como en casa. La pena no habernos podido quedar más tiempo! Ollogoyen está al lado de Estella y de Pamplona pero teníamos la sensación de habernos ido muy lejos. Ojalá podamos volver algún día!!!

Casa rural con mucha personalidad y muy cómoda tanto para los niños como para los perros .
Limpieza y detalles de 10.
En plena naturaleza ,lo que hace que los paseos con los niños y los perros sean relajados y sin ningún peligro
Muy muy buena experiencia

Perfecta para desconectar un fin de semana, incluso unas vacaciones. El entorno es precioso, cerca de Estella. La casa tiene un gran jardín muy bien cuidado dónde se puede hacer barbacoa, y en la casa no falta de nada.

En junio estuvo mi hija unos días con sus amigas. Fue su primera salida con las amigas y el trato que recibieron por parte de las dueñas de la casa fue excelente. La casa es una casa rural de las de antaño y está situada en una zona excepcional para hacer excursiones y visitar la zona. Sólo me queda dar las gracias a las propietarias por su bien hacer y por el trato excelente que recibieron nuestras hijas, y por supuesto, me gustaría recomendar la casa porque estoy segura de que pasarán unos días inolvidables.

Es una auténtica casa rural, arreglada, pero que te hace sentir en otra época. Pueblo muy tranquilo y cerca de todo. La dueña es muy agradable y atenta. Tiene aparcamiento, barbacoa, chimenea y jardín. Ideal para ir con niños ya que tiene zonas de juego y la zona es muy tranquila. Volveremos.

Casa súper chula, grande y fresca, con jardín privado. Son muy amables y viven al lado por si necesitas algo. Los niños han estado genial también. Tienen dos gatitos este año así que los niños han estado muy distraído, jajaja. Muchas gracias Maria y a su marido, muy amables. Los niños dicen que se quedan aquí jajajja.

Es un sitio perfecto para desconectar. La casa es preciosa y sus dueños majisimos. Pasamos un fin de semana con niños y genial. Tiene un jardín con columpios y un porche con barbacoa. También tienen animales para ir a darles de comer. A 1.5km del museo de la trufa. Muy recomendable.

Esta en un pueblo donde termina la carretera, osea que pérdida poca... Hay pocos habitantes y casi todos relacionados con la casa, cosa que es de agradecer, además de tener todo organizado para familias con niños o no...
El salón amplio y en dos alturas.
Jardín para hacer barbacoa muy bien de espacio, pero hago un inciso, una barbacoa de obra sería un punto más extra.
Cerca está el museo de la trufa, que hace pintxo pote los sábados que están delicados, también si te gusta el hacer turismo verde, es la zona idónea, además de estar en las faldas de la sierra de lokiz, donde puedes disfrutar de vistas de todo el valle y cerca de varios monasterios, de Estella, etc...

Ubicación estupenda para unos dias tranquilos, rurales pero con todas las comodidades en la casa o en poblaciones cercanas.
La casa y la propietaria estan llenas de detalles que acogen muy bien a los huéspedes.
Un encanto especial desde los ojos de los niños con el jardín, los juguetes o las visitas al entorno rural y animal.
No es una casa apta para personas con movilidad reducida o niños muy pequeños (sin vigilancia) ya que tiene muchos tramos de escaleras indispensables para moverte por la casa.

Casa rural con mucho encanto, con un jardín estupendo con barbacoa, columpios... a los pies de la Sierra de Lóquiz.
Instalaciones muy auténticas.
(A tener en cuenta: tiene bastantes escaleras)

Hemos ido este año y repetiremos seguro. La casa genial, rural, con sus toques de antigüedad pero muy bien cuidada, conservada y muy limpia. El interior espacioso, tanto cocina, como comedor y habitaciones. El txoko de abajo no lo utilizamos pero tiene una habitación con futbolin y todo. Lo mejor, el jardín, con su porche, su verde para poner una piscinita y tener a remojo a los peques. Su barbacoa y columpios incluidos. El pueblo muy muy pequeño, con sus gentes de toda la vida. No hay bar ni nada, pero las rutas para hacer desde la misma casa, andando o corriendo por las pistas, son de 10. Gran trabajo a Maria y su familia. Gracias al 'abuelo' por sus explicaciones del huerto y su tiempo. Y Nekane ya tiene ganas de ver a Manes de nuevo.

Gran fin de semana en ésta casa rural. Buena atención por parte de María, atenta y amable. La casa limpia y cuidada al detalle. Y para los peques genial el jardín y la parte de abajo con todos los juguetes.

Muy apropiada para quienes buscan tranquilidad, desconectar del frenético ritmo y ruido de la ciudad para estar en contacto con la naturaleza.
Está en Ollogoyen, un pueblecito muy pequeño de Navarra que no tiene ni bares. Es imprescindible tener vehículo para poder desplazarse a comprar cosas de primera necesidad.
Tiene una fuente con agua riquísima y fresquita en la plaza del pueblo aunque la del grifo también se puede beber. La gente es muy amable.
La recomiendo.

Pequeño y tranquilo pueblo con la Sierra de Lókiz de fondo y Urbasa y Urederra a escasa 1/2 hora. Animales para visitar y gran variedad de actividades en la zona. Museo de la Trufa y de zonas de baño y de restauración muy próximas al alojamiento.

Un lugar donde descansar con mil cosas para hacer.
Una casa con encanto y rincones donde descansar después de disfrutar de un día de excursiones por la zona. Muy bien situada, cerca de la autovía para poder ir a pasar el día a Logroño, Pamplona o Vitoria, todo a menos de 1 hora. Si lo que te gusta es la montaña tienes el parque natural de Urbasa a 20 min. donde poder hacer excursiones al nacedero del Urederra (reservar antes en la web), el mirador de Pilatos o ir a pasear en hermosos bosques de hayedos.

La casa es increíble para ir con niños, incluso con mal tiempo da mucho juego. La atención por parte de María ha sido muy buena. Sin duda alguna 100% recomendable. Repetiremos!

Un lugar ideal para alojarse, el entorno precioso, tranquilo y la casa muy bien conservada y cuidada, nos ha encantado su decoración. Gracias María por ayudarnos con la chimenea. Volveremos.

Preciosa casa rural en un enclave mágico. Un jardín estupendo, y unas vistas espectaculares. Para quedarse toda la vida aquí.

Una casa con mucho encanto y los que lo regentan chapeau. Es la segunda vez que vamos la familia y nl sera la ultima. Muchisimas gracias Maria y toda su familia por sentirnos como en casa, hasta pronto!!!!